PragmaTIL: un proyecto que implica a los pacientes en el diseño de un ensayo clínico contra el cáncer
Publicado el 30/05/2024
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La Misión Cáncer de la Comisión Europea es una iniciativa de la UE que busca comprender mejor la enfermedad, facilitar su diagnóstico temprano y mejorar los tratamientos y la calidad de vida de los pacientes situándolos en el centro de la investigación y la innovación. Por el momento, dentro de la convocatoria de ensayos clínicos pragmáticos de la Misión Cáncer se han financiado 12 proyectos en los que se llevarán a cabo ensayos clínicos para optimizar el diagnóstico y el tratamiento de pacientes con cánceres refractarios, es decir, tipos de cáncer que no responden a los tratamientos convencionales como la quimioterapia o la radioterapia.
Uno de estos proyectos es PragmaTIL, liderado por el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) de Barcelona y que cuenta con la participación de 12 instituciones de 6 países, incluida la Fundación ”la Caixa”. En el proyecto se llevará a cabo un ensayo clínico cuyo objetivo es reducir la toxicidad y los efectos secundarios de un tratamiento actualmente disponible contra el cáncer. Para lograrlo se ha desarrollado un protocolo de trabajo en estrecha colaboración con pacientes que ya habían recibido previamente tratamientos similares con el fin de lograr una comunicación más efectiva y garantizar una recolección exhaustiva de síntomas y un seguimiento integral de los pacientes que participen en el ensayo clínico PragmaTIL.
¿Qué tratamiento evalúa el ensayo PragmaTIL?
Las inmunoterapias han demostrado resultados prometedores contra el cáncer en los últimos años. Bajo esta etiqueta general conviven muchas terapias diferentes que ayudan al sistema inmunitario a combatir la enfermedad. Una de ellas es la «terapia celular adoptiva», también conocida como «inmunoterapia celular», que utiliza las células del sistema inmunitario del propio paciente para combatir el cáncer.
La terapia celular adoptiva más común para tratar ciertos tipos de cáncer, como el melanoma, es la terapia con linfocitos infiltradores de tumores (TIL-ACT), en la que se focaliza el proyecto PragmaTIL.
Esta terapia implica extraer linfocitos T que ya han intentado combatir los tumores del paciente, replicarlos en el laboratorio hasta lograr billones de células para luego reintroducirlos y potenciar su capacidad para localizar y destruir los tumores de manera más efectiva.
Este tratamiento requiere la administración de una molécula, la interleucina 2, que actúa como un factor de crecimiento para los linfocitos promoviendo su proliferación y actividad. Pero, aunque esta molécula es fundamental para estimular la respuesta inmunitaria contra el cáncer, puede provocar efectos secundarios muy intensos, lo que deteriora considerablemente la calidad de vida de los pacientes durante el tratamiento. En algunos casos, esto lleva a interrumpir el tratamiento, mientras que en otros, los pacientes ni siquiera pueden acceder a él por precaución.
Por esta razón, en el ensayo clínico PragmaTIL se probará una versión modificada de la interleucina 2 que disminuye los efectos secundarios de la terapia sin perder su eficacia. «El objetivo del proyecto es optimizar el tratamiento con terapia celular adoptiva de linfocitos infiltradores de tumores en pacientes con melanoma, cáncer de pulmón o cáncer de cuello uterino, y ampliar y mejorar significativamente su aplicación clínica», destaca Elena Garralda, directora de la Unidad de Investigación de Terapia Molecular del Cáncer (UITM) – CaixaResearch del VHIO y coordinadora de PragmaTIL.
Para lograr su objetivo, PragmaTIL involucra a los pacientes en el diseño del protocolo del ensayo clínico y en el seguimiento del proceso mediante entrevistas y cuestionarios sobre su calidad de vida. Esto mejora tanto la eficiencia del estudio como el bienestar de los pacientes. «PragmaTIL pone al paciente en el centro», señala Jorge García, gestor de proyectos en el Área de Relaciones con Instituciones de Investigación y Salud de la Fundación ”la Caixa”.
«No solo es interesante porque trata de reducir los efectos secundarios del tratamiento, sino también por cómo se lleva a cabo. Hemos incluido a los pacientes tanto en el diseño como en el seguimiento del ensayo clínico. Esto está completamente alineado con los objetivos de la Fundación ”la Caixa”, que se centran en dar apoyo a la mejor investigación e innovación para ayudar a los pacientes, curar a más personas y mejorar la calidad de vida de todos», añade.
Un ‘living lab’ y un comité de pacientes
El proyecto PragmaTIL se estructura en diferentes paquetes de trabajo que cubren desde el desarrollo del ensayo clínico hasta la participación de los pacientes. En la celebración de la segunda reunión de PragmaTIL, durante los días 15 y 16 de abril, se anunció el envío de la propuesta del protocolo del ensayo clínico y la documentación regulatoria a la Agencia Europea de Medicamentos. El desarrollo del protocolo de este ensayo, que permitirá determinar si es posible reducir los efectos secundarios del tratamiento, se inició a través de un proceso en el que participó un comité formado por investigadores, pacientes y profesionales de la salud.
«Primero trabajamos con el comité y después hicimos talleres con cada uno de estos grupos: pacientes por un lado y profesionales por otro. Posteriormente, integramos los resultados y los validamos con ambos grupos. Ahora hemos definido unas prioridades que estamos consensuando con los profesionales y los pacientes para luego seguir cocreando más soluciones. Siempre buscamos mejorar la investigación y atender mejor las necesidades de los pacientes», explica Rosina Malagrida, responsable del Living Lab Salud de IrsiCaixa y coordinadora del Barcelona CaixaResearch Living Lab, a cargo del diseño de la metodología de trabajo con los pacientes de PragmaTIL.
Aunque el grueso del ensayo clínico aún no ha comenzado, el proceso de cocreación con los pacientes ya está dando resultados tangibles. «Gracias a la participación activa de los pacientes estamos finalizando la validación de un pequeño libro informativo que aborda todas las necesidades que se han detectado durante los talleres», explica. «Hemos identificado áreas de comunicación que pueden mejorarse, así como lo que en inglés denominamos supportive care, que es toda la parte que se refiere a mejorar el bienestar del paciente durante todo el proceso, en aspectos tanto de salud mental y bienestar emocional como de nutrición y de ejercicio físico».
El enfoque de laboratorio vivo o living lab que se aplica en PragmaTIL se centra en hacer investigación más cercana a la «realidad» trabajando codo con codo con los usuarios finales. La participación de los pacientes en la investigación médica es crucial, pero sigue sin ser habitual. Los ensayos que involucran a los pacientes en todo el proceso, como PragmaTIL, son escasos. Al permitir que los pacientes participen desde las primeras etapas en el desarrollo del protocolo del ensayo clínico se abre la puerta a información útil y valiosa para la investigación, ya que nadie conoce tan bien como los pacientes qué es importante para ellos, cuál es el beneficio y qué es lo que realmente necesitan.
«El comité ha sido muy valioso. Nos ayudó a identificar no solo qué efectos secundarios deberíamos medir y qué instrumentos deberíamos utilizar para hacerlo, sino también cuáles son las necesidades de los pacientes durante esta terapia y el impacto del ensayo en sí», añade Maria Alice Borinelli-Franzoi, oncóloga e investigadora del Institut Gustave Roussy de Francia y responsable del paquete de trabajo en el que participa la Fundación ”la Caixa”, centrado en la integración del paciente en el proyecto. «Al involucrar a los pacientes desde el inicio del desarrollo del protocolo del ensayo clínico y durante todo el proceso, estamos transformando la forma en que llevamos a cabo la investigación».
Aunque apenas ha pasado un año desde el inicio de PragmaTIL, el proyecto ya ha arrojado los primeros resultados interesantes gracias a la ayuda de los pacientes en esta primera fase de preparación del estudio clínico. Esto nos acerca a la consecución del gran objetivo de la Misión Cáncer de la Comisión Europea: mejorar la vida de más de tres millones de personas para 2030 a través de la prevención y la cura de la enfermedad, así como de la mejora de las condiciones de los pacientes y de sus familias.
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PragmaTIL: a project involving patients in the design of a clinical trial against cancer
The European Union Mission on Cancer is an EU initiative that seeks to better understand the disease, facilitate early diagnosis and improve treatments and quality of life for patients by putting them at the centre of research and innovation. So far, 12 projects have been funded under the Mission on Cancer call for pragmatic clinical trials to carry out clinical trials to optimise the diagnosis and treatment of patients with refractory cancers, i.e. cancers that do not respond to conventional treatments such as chemotherapy or radiotherapy.
One of these projects is PragmaTIL, led by the Vall d’Hebron Institute of Oncology (VHIO) in Barcelona and involving 12 institutions from six countries, including the ”la Caixa” Foundation. The project will carry out a clinical trial aimed at reducing the toxicity and side effects of a currently available cancer treatment. To achieve this, a working protocol has been developed in close collaboration with patients who have previously received similar treatments, in order to achieve more effective communication and ensure a thorough collection of symptoms and a comprehensive follow-up of patients participating in the PragmaTIL clinical trial.
What treatment does the PragmaTIL trial assess?
Immunotherapies have shown promising results against cancer in recent years. Under this general label there are many different therapies that help the immune system fight the disease. One of these is “adoptive cell therapy”, also known as “cellular immunotherapy”, which uses a patient’s own immune system cells to fight the cancer.
The most common adoptive cell therapy used to treat certain types of cancer, such as melanoma, is tumour-infiltrating lymphocyte adoptive cell therapy (TIL-ACT), which is the focus of the PragmaTIL project.
This therapy involves taking T lymphocytes that have already tried to fight the patient’s tumours, replicating them in the laboratory into billions of cells and then reintroducing them to boost their ability to target and destroy tumours more effectively.
This treatment requires the administration of a molecule called interleukin-2, which acts as a growth factor for lymphocytes, promoting their proliferation and activity. However, while this molecule is essential for stimulating the immune response against cancer, its use can cause very serious side effects that significantly affect the quality of life of patients during treatment. In some cases, this leads to discontinuation of treatment, while in others, patients cannot even access it, as a precaution.
For this reason, the PragmaTIL clinical trial will test a modified version of interleukin-2 that reduces the side effects of the therapy without losing its efficacy. “The aim of the project is to optimise the treatment with adoptive cell therapy of tumour-infiltrating lymphocytes in patients with melanoma, lung cancer or cervical cancer, and to significantly expand and improve its clinical application,” says Elena Garralda, director of the Molecular Cancer Therapy Research Unit (UITM) – CaixaResearch at the VHIO and coordinator of the PragmaTIL project.
To achieve its goal, PragmaTIL involves patients in the design of the clinical trial protocol and in monitoring the process through interviews and questionnaires about their quality of life. This improves both the efficiency of the trial and the well-being of the patients. “PragmaTIL puts the patient at the centre of everything we do,” says Jorge García, projects manager in the Relations with Research and Health Institutions Department of the ”la Caixa” Foundation.
“It’s interesting not only because it aims to reduce the side effects of treatment, but also because of the way it’s conducted. We have included patients in both the design and follow-up of the clinical trial. This is completely in line with the objectives of the ”la Caixa” Foundation, which focus on supporting the best research and innovation to help patients, cure more people and improve everyone’s quality of life,” he adds.
A living lab and a patient committee
The PragmaTIL project is structured into several work packages covering everything from clinical trial development to patient participation. At the second PragmaTIL meeting on 15-16 April, it was announced that the clinical trial protocol proposal and regulatory documentation had been submitted to the European Medicines Agency. The development of the trial protocol, which will determine whether it is possible to reduce side effects, was initiated through a process involving a committee made up of researchers, patients and healthcare professionals.
“First we worked with the committee and then we conducted workshops with each of these groups: patients on the one hand and professionals on the other. We then integrated the results and validated them with both groups. Now we’ve defined priorities that we’re agreeing with the professionals and patients to continue co-creating more solutions. We’re always looking to improve research and better meet the needs of patients,” explains Rosina Malagrida, head of the Living Lab for Health at IrsiCaixa and coordinator of the Barcelona CaixaResearch Living Lab, in charge of designing the methodology for working with PragmaTIL patients.
Although the bulk of the clinical trial has not yet started, the co-creation process with patients is already yielding tangible results. “Thanks to the active participation of the patients, we’re finalising the validation of a small information booklet that addresses all the needs identified during the workshops,” she explains. “We’ve identified areas of communication that can be improved, as well as what we call supportive care, which is all that relates to improving the patient’s well-being throughout the process, both in terms of mental health and emotional well-being, as well as nutrition and physical exercise.”
PragmaTIL’s living lab approach focuses on bringing research closer to “reality” by working hand in hand with end-users. Patient participation in medical research is crucial, but is still uncommon. Trials that involve patients throughout the entire process, such as PragmaTIL, are rare. Allowing patients to participate from the earliest stages of clinical trial protocol development opens the door to useful and valuable information for the research, as no-one knows better than patients what is important to them, what the benefits are and what they really need.
“The committee has been very valuable. It helped us identify not only what side effects we should measure and what instruments we should use to do so, but also what the needs of patients are during this therapy and the impact of the trial itself,” adds Maria Alice Borinelli-Franzoi, oncologist and researcher at the Institut Gustave Roussy in France and head of the work package involving the ”la Caixa” Foundation, which focuses on integrating the patient into the project. “By involving patients from the beginning of the development of the clinical trial protocol and throughout the entire process, we’re transforming the way we conduct research.”
Although only one year has passed since the launch of PragmaTIL, the project has already produced interesting results thanks to the help of patients in this first phase of clinical trial preparation. This brings us closer to achieving the major goal of the European Union Mission on Cancer: to improve the lives of more than three million people by 2030 by preventing and curing the disease and improving conditions for patients and their families.