La dieta mediterránea y la reducción del estrés durante el embarazo mejoran el neurodesarrollo infantil
Publicado el 13/10/2023
El ensayo clínico IMPACT-BCN ha sido el primero en evaluar el efecto de intervenciones activas sobre el estilo de vida, como la dieta mediterránea o el mindfulness, en mujeres embarazadas. Un ensayo clínico publicado en 2021 demostró por primera vez que la dieta mediterránea o la reducción del estrés durante el embarazo reducían en más de un 30 % el riesgo de tener un bebé con bajo peso al nacer.
Ahora, los investigadores han ido un paso más allá, evaluando los efectos del estilo de vida materno durante el embarazo sobre el neurodesarrollo infantil. Para ello, el ensayo, que ha contado con el apoyo de la Fundación “la Caixa”, ha analizado los datos a los dos años de vida de 626 niños y niñas mediante un test de Bayley, una prueba estandarizada para medir el neurodesarrollo infantil.
Los resultados indican que las hijas e hijos de las mujeres que siguieron un programa de dieta mediterránea durante el embarazo mostraron mejores resultados en el test, en particular a nivel cognitivo (desarrollo sensorial y motor, relación con objetos y la formación de conceptos) y socio-emocionales (en referencia a las relaciones e interacciones). Por otro lado, los hijos e hijas de las mujeres que siguieron un programa de reducción de estrés durante el embarazo presentaron mejores resultados en el dominio socio-emocional.
“Estos resultados aportan un claro mensaje positivo que empodera a madres y familias. Es posible influir positivamente en la salud del embarazo y del futuro bebé con medidas aplicables con relativa facilidad”, explican los autores.
Durante los últimos 10 años, diversos estudios habían demostrado que las dietas poco saludables o el estrés materno se asociaban a peores resultados en el neurodesarrollo infantil. Sin embargo, este es el primer estudio que evalúa intervenciones activas, como la dieta mediterránea o el mindfulness, sobre el estilo de vida en mujeres embarazadas.
La dieta mediterránea, que ha demostrado beneficios muy claros en la prevención de enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas, metabólicas y cáncer, se basa en una alimentación rica en verduras, legumbres, pescado, carnes blancas, lácteos, cereales integrales y grasas saludables, como el aceite de oliva virgen extra y las nueces. Asimismo, la reducción del estrés en el estudio se realizó con un programa estructurado de reducción del estrés basado en mindfulness, complementado con actividades relacionadas de relajación.