“Es importante tener claro qué quieres desarrollar, para quién y quién va a pagar por tu producto y su desarrollo”
Publicado el 09/10/2018
Post de la Obra Social ”la Caixa” en colaboración con CaixaImpulse.
Además de financiación y formación, CaixaImpulse pone a disposición de los participantes un mentor para guiarles y aconsejarles en el trayecto del laboratorio al mercado. Directora científica y vicepresidenta de Oryzon Genomics, Tamara Maes es mentora del programa desde su arranque en 2015. Hablamos con ella sobre su experiencia en CaixaImpulse y sobre el papel que juega la figura del mentor.
¿Cuál es tu opinión sobre CaixaImpulse?
Creo que es un programa muy necesario. Ha habido cierta evolución, pero aún hoy en el ámbito académico no se tiene muy en cuenta la posibilidad de transferir tu investigación a la sociedad. La ciencia básica es muy importante, y hay que seguir haciéndola. Pero también es necesaria ciencia que tenga un retorno para la sociedad, donde la transferencia tecnológica, la creación de empresas y la actividad económica que se genera son claves.
¿Qué rol desempeñáis los mentores?
La mentoría es una formación basada en la experiencia propia, en lo vivido, más que en conocimientos adquiridos en los libros de texto. Gracias a las sesiones de formación que ofrece CaixaImpulse, los participantes van aprendiendo y sus proyectos se van refinando. Entonces acuden a nosotros con sus ideas y preguntas. Y ahí es donde aportamos nuestra experiencia para guiarlos y asesorarlos.
¿En qué sentido?
Podemos, por ejemplo, alertarlos sobre determinados tipos de dificultades que nosotros nos hemos encontrado para que puedan hacerles frente o reconducir la situación. Estos problemas pueden surgir a todos los niveles: estrategia de negocio, riesgo técnico, entorno regulatorio, evolución del equipo, etc. Nada es estanco y es importante considerar los efectos a corto y largo plazo de las decisiones que tomarán como empresarios. Lo principal es poner en marcha el proyecto y sobrevivir, pero pensando en el mañana. Hay que apuntar alto, ser original y hacer ciencia de vanguardia. Solo así se podrá hacer frente a la competencia.
¿Qué aspecto es clave en la visión emprendedora?
Cuando consideras montar una empresa necesitas pensar en quién va a ser tu cliente. Necesitas entenderle, saber lo que considera más relevante. El cliente puede ser otra empresa más grande, un sistema nacional de salud o, directamente, el usuario final. Así que es importante tener claro qué quieres desarrollar, para quién y quién va a pagar por tu producto y su desarrollo.
¿Qué debilidades y fortalezas detectas entre los participantes?
Normalmente conocen poco los procesos de transferencia, la valoración de una idea o resultado incipiente, y subestiman los recursos necesarios para desarrollarla. Tampoco acostumbran a evaluar aspectos de propiedad industrial, y a menudo emplean tecnologías protegidas por patentes. Esto no suele ser un problema en la investigación pública, pero en la industria, y sobre todo para la explotación comercial, puede que se necesiten licencias de terceras partes. También desconocen en gran medida el proceso de creación de una empresa y las obligaciones que conlleva. Sin embargo, algunos participantes son muy lanzados, tienen dones comerciales y ganas de acercarse rápido al mercado. En general, vienen con hambre de conocimiento y con ganas de aprender.
¿Qué consejo le darías a alguien que esté pensando en presentarse a CaixaImpulse?
Básicamente dos. El primero es que no lo considere como una fuente de financiación más para su proyecto de siempre. Si quieres aprovechar el programa necesitas estar convencido de que tienes una idea que puedes llevar al mercado, ya sea por transferencia desde tu centro o creando una spin-off o start-up. El segundo consejo es que es muy importante tener una mente abierta. Las dudas son lógicas, pero en cada edición ha habido buenas ideas y el tiempo nos dirá si van a tener éxito o no.